miércoles, 21 de julio de 2010

Estoy Solo


Estoy acostumbrado o resignado a ese orden lógico de que las cosas tengan que estar en su lugar correspondiente.

Aprendí, como aprendieron todos, a llorar llorando para adentro así nadie corre el riesgo de dañar a nadie.

No es cómodo encontrar una lágrima debajo de la servilleta y tener que pensar en un motivo: eso arruinaría la ya difícil digestión de un hombre preocupado por su trabajo permanentemente.

Aprendí, como aprendieron todos, a no reírme solo mientras voy caminando por la calle, cuando tiene que haber una compañía para que la risa no parezca una piedra lanzada al rostro de quién te ve reír, no es cómodo para nadie encontrarse de pronto y sin aviso con una risa suelta...
Como esa desafinada nota que recorre el aire y hace que las cadenillas ajusten las gargantas, que las cosas pesen una tonelada, que las agujas de los relojes pinchen como espinas, que los cubiertos se conviertan casi como los tan difíciles de manejar, palillos chinos y que la copa de los árboles se vuelvan totalmente invisibles.

¿Acaso no pasaste nunca por delante de la copa de un árbol invisible?

Cuantas veces mi inútil marcha me ha hecho no poder sin siquiera levantar la mirada para ver la copa de los árboles, ni dejarme oler la fragancia de tierra húmeda, después de la lluvia, porque he fijado más mi atención en no caer.

En el estricto orden de las cosas, todo lo fui perdiendo, o casi todo. Hasta las ganas de decir....
Por eso creo que me hará bien encontrarte, porque para mi será eso, no te buscaré, te encontraré. Porque tantos miles de personas que estamos en este, para mi, absurdo mundo, tropezaré contigo. Hacía tanto tiempo que no se me aceleraba el corazón...

Y aunque siempre estaremos despidiéndonos y siempre fijando una fecha para el próximo encuentro no importará, algún día reire aún mas porque siempre despertare y lo primero que veré será tu cara y porque me ayudarás a caminar solo por la calle y que mire uno por uno los árboles de la plaza y hasta hablaré en voz alta con el aire caluroso de una tarde de verano, repitiendo palabras como sueño y esperanza. Y todo todo se ordenará:

Tengo palpitaciones, se me rompen las copas al lavarlas, de cada cajón que abro sale una nube de mariposas de todos los colores...y entonces ya no se me caerán las llaves al tratar de colocarlas en el hueco de la cerradura. Ya no llorare por tener que ser "cómodo", por tener que resignarme tanto, por haber permitido que me hiciera efecto la anestesia de la tolerancia.

Es que así me siento, como algo fragil que con todo se desvanece. Que necesita algo para repararse.

Lo siento mucho pero hoy no me apetece para nada poner colores.

2 comentarios:

  1. Solo? es tan relativo estarlo. :) de todos modos, sabes que nunca del todo, porque tenemos un sueño que cumplir, mi sueño de estrenar notre dame, recuerdas? :D eso siempre será "algo" , Aedea. Como grupo y fuera, siempre estamos con alguien :D La pareja bueno... es cuestion de esperar :D

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  2. Todo llegará, pero el tiempo parece correr más lento si esperas algo...

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